BYUNG CHUL HAN
LA TONALIDAD DEL PENSAMIENTO
El inglés es una lengua económica. Por eso en nuestro mundo, atravesando de arriba abajo por la economización, todos hablamos exclusivamente inglés.
Para mí, el alemán presenta una afinidad natural con la filosofía.
En francés, aprender de memoria se dice apprendre para coeur, “aprender de corazón”.
Toda belleza es paradójica, yo aspiro a esa belleza. La tonalidad de mi pensamiento es paradójica. La describo con giros paradójicos, como luz oscura, brillo oscuro y tristeza luminosa.
Mis libros no son repeticiones, sino variaciones. Hay que diferenciar entre lo idéntico y lo mismo.
Tal vez la tierra sea un sinónimo de la felicidad, sin embargo, hoy en día se aleja cada vez más de nosotros.
Dios reconoce las cosas de manera no conceptual. Solo el ser humano piensa.
SOBRE EROS
“LO HERMOSO NO ES EL BRILLO MOMENTÁNEO, LA ATRACCIÓN INMEDIATA, SINO LA SILENCIOSA PERSISTENCIA DE LA ESTELA”.
Todo lo que se mueve se hace desaparecer. Solo es visible lo que permanece quieto.
Quien ha estado deprimido, quien ha pasado por una depresión, sabe que las personas deprimidas pierden el mundo. Se quedan sin mundo.
Teclear constantemente sobre el smartphone y deslizar los dedos por su pantalla condiciona masivamente la relación con el mundo, con el otro.
Cuando perdemos la mirada perdemos al otro. Sin mirada no es posible generar empatía.
La pérfida lógica del rendimiento me obliga a superarme a mí mismo. En cuanto consigo algo, quiero conseguir más aun, es decir, quiero superarme. Sin embargo, ¿es posible superarse a uno mismo? Esta absurda lógica del rendimiento acaba conduciendo al colapso. Todo se encuentra sometido al dictado del rendimiento. Las vacaciones son rendimiento.
La sociedad actual del rendimiento está plenamente dominada por el verbo modal poder. YES WE CAN es su lema.
Jenny Holzer; truisms, máximas, aforismos, reflexiones.
“PROTECT ME FROM WHAT I WANT”. Protégeme de lo que quiero, esa es la paradoja de la libertad.
Queremos ser auténticos, pero en este mundo de la autenticidad todos somos iguales, es decir, clones. Somos clones que quieren ser auténticos. Vivimos en medio de esta paradoja.
SOBRE LA ESPERANZA
El optimismo no necesita adquirirse. Más bien constituye algo tan evidente y cuestionable como la altura de una persona u otros rasgos imposibles de modificar.
Solo la esperanza amplía el horizonte de lo que tiene sentido. El miedo convierte a las personas en sujetos obedientes y chantajeables. Donde reina el miedo no hay libertad. Quien tiene miedo se siente acorralado. Nuestro propio comportamiento se encuentra marcado cada vez más por los miedos: el miedo a fracasar, el miedo a no estar a la altura de las propias expectativas, el miedo a no ser capaz de seguir el ritmo o el miedo a quedarse descolgado. Precisamente este miedo omnipresente incrementa la productividad.
El miedo aísla a las personas. Es imposible tener miedo juntos. El miedo no genera comunidad, no genera un nosotros. En el miedo, cada cual está solo consigo mismo.
“Una estrella / tiene todavía luz. / Nada, / nada está perdido”.
Paul Celan